NO HABLAMOS DE LOAN PERO (TAMBIÉN) HABLAMOS DE LOAN

En Misiones está la Triple Frontera. En ese territorio argentino fue rescatado de las redes de trata el 85 por ciento de las personas en los últimos dos años.

Diario Lateral y su Radio están dirigidos, en Misiones, por el periodista Sergio Centenaro quien ha preparado este informe especial para www.purochamuyo.com / Cuadernos de Crisis.


Kitty Sanders es una periodista e investigadora que se ha infiltrado en las redes de trata durante años, exponiendo su cuerpo, también, a la explotación sexual. Ha escrito libros y artículos. El testimonio que compartimos fue vertido a Diario Lateral y no es una ficción.

En 2004 cuando empecé a investigar era muy joven. No sabía ni las consecuencias, ni la realidad de este delito. Yo solamente quería ayudar a las chicas que están en la prostitución, pero cuando me puse a investigar entendí que ese es un delito de trata, que tiene muchas raíces, y que es el tercer delito más lucrativo a nivel mundial, y esto no podría jamás ocurrir si no tuviera muchas raíces, porque hay mucho dinero en juego.

Para hacerlo tuve que poner mi propio cuerpo, enterarme como víctima, meterme adentro. Ahí entendí que es el delito más inhumano que existe, sin duda el más inhumano. ¿Por qué? Porque cuando una persona cree que tiene derecho a comprar o vender a otra persona…no puede haber nada peor. Esa persona cree que no hay nada malo en su pensamiento, y desde ahí -si yo tengo derecho a vender a otra persona-, entonces nada me impide vender un bebé o una criatura para un pedófilo, para que lo mate, o que lo viole y lo mate.

La trata de personas es explotación total del cuerpo, pero no solo del cuerpo: es utilizar el cuerpo del otro, utilizar su alma, utilizar el cerebro, utilizar todo. Es una explotación total del humano.


Maddona – E. Munch – Museo MOMA

Me parece que es muy importante prevenir este delito y aclarar los métodos que utilizan para captar a sus próximas víctimas. Antes, las redes de trata utilizaban los métodos de secuestro físico de sus víctimas, ahora no. Ahora ellos utilizan métodos de chantaje, el engaño, manipulación. Les resulta más fácil engañar por el desarrollo de las tecnologías, y las redes sociales.

Tomemos una persona joven, chica o chico, que ven una oferta de viaje a Buenos Aires para trabajar. ¡Claro que son avisos truchos en las redes sociales! Pero ellos lo ven como una propuesta de trabajo como modelo, artista plástica, niñera. ¿Acaso alguna agencia de modelos va a buscar o contratar por las redes sociales? Ninguna familia busca niñeras a través de redes sociales. Entonces, si alguien te ofrece viajar lejos del lugar donde vives, te ofrece plata rápida, y no tiene preocupación por tu nivel de profesionalismo, casi 90 por ciento que es una trampa.

Esto además sucede porque el sistema se monta en el deseo de la juventud de ser independiente, tener dinero, viajar a otro lugar, algo que es muy bueno a priori, pensar en trabajar y en independizarse, pero ahí encaja la lógica de este delito.

Siendo honestos, debemos reconocer que es muy difícil rescatar a las chicas y chicos, las víctimas, porque el rescate es solamente el primer paso; después viene la ayuda psicológica, la ayuda fisiológica, y la ayuda social a las víctimas. Todo el proceso de recuperación puede durar hasta diez años.

¿Qué rol juega acá el proxeneta, tratante, chulo, rufián? Ellos reclutan mujeres u hombres, aunque la mayoría son mujeres porque es más fácil ganar su confianza. Y hay una imagen construida de que estos delincuentes ‘odian a sus víctimas´. No. Ellos solamente quieren plata, quieren utilizar una chica o un chico a su favor, sea a través de la explotación sexual, como prostituta, prostituto, o a través de explotación laboral, como trabajo forzado en una zona rural, talleres clandestinos, o puede utilizar el cuerpo de esa persona, y sacarle los órganos. De todo eso se compone el delito de trata.

Hace 2 décadas el tema de la trata no era tan visible como ahora. Pero ya desde ese momento cuando empecé para ayudar a la gente, vi la dimensión que tiene este delito en los países de Unión Europea, en los países que aclaran que en su territorio no existe este delito, que hay leyes y todo está bien. Y entonces yo pregunto ¿cómo es que en cada burdel de Francia hay chicas argentinas, paraguayas, hay uruguayos, cómo es? ¿Cómo que no existe este delito? Yo lo vi en Inglaterra, así como en Francia y Alemania. El delito ‘no existe’, pero existe. Luego, cuando viajé a los países de América Latina, investigando desde México hasta Chile, entendí que realmente este delito está presente en todas las partes del mundo.

Sin embargo, hay una gran diferencia, y es que los europeos toman las chicas y chicos de América Latina para usarlos, para consumir. Somos ‘donantes’ involuntarios. Donantes de cuerpos, de órganos, de todo. Y la mayoría de los consumidores son los europeos, en los países europeos.

Me preguntan siempre ¿Órganos también? Órganos también, mucho el tema de riñones, porque es lo más fácil para hacer una operación. Hay también de otro tipo de órganos, pero en la mayoría de los casos es por riñones. De todo el delito de trata, el de los órganos es la parte más corrupta, porque detrás de la persona hay varias ramas, y la corruptela de este negocio rentable precisa de los médicos para hacer la operación, para conseguir la información, para encontrar un cliente que necesita el órgano, para encontrar una persona compatible, para matar a la persona, para quemar el cuerpo. Entonces es muy difícil, pero hay mucha plata, mucha corrupción.

Ellos, para no dejar un testigo posible, lo matan. Sacan un riñón y lo dejan que muera, y después queman el cuerpo, porque ahí hay otro actor en esta trama: trabajan mucho junto con las funerarias, con los crematorios.


Y entonces nosotros pensamos que hay un chico desaparecido o desaparecida… Nunca le dan salida a la persona que le sacan un órgano. Aunque hay posibilidad de que la persona viva con un riñón, ellos no dan esa chance.

¿Por qué? Porque es un testigo, que en algún momento se anima a dar testimonio, entonces ellos no quieren poner en riesgo su libertad de comerciar con la vida y los cuerpos. Por eso prefieren matarlo y cremarlo, para que nosotros no encontramos el cuerpo. Por eso tenemos tantas chicas y chicos desaparecidos… y realmente no podemos encontrar ni cuerpos vivos ni cuerpos muertos.

Es el conocido homicidio o asesinato criminis causa, ¿no? El deseo principal no es matar, pero para cuidarse, buscando otro objetivo, necesitan matarlo para tapar la verdadera causa.

Y esta parte de este delito es lo que nunca aparece: escuchamos sobre el tema de explotación sexual, desde prostitución a películas pornográficas, sí, sí, pero la venta de órganos, mucha gente cree que son mitos. Y quieren poner en nuestra cabeza que es un mito, que no existe en la Argentina, que no hay presencia en Misiones, cuando este delito está presente en zonas donde hay fronteras, y Misiones es zona de triple frontera. Entonces, es una zona roja, donde por datos de PROTEX, que es parte de la Fiscalía de la Nación de la Argentina, dedicada al tema de tráfico de personas, el 85 por ciento de las personas salvadas fueron rescatadas aquí. Son argentinas, son brasileñas, paraguayas: cantidad de chicas y chicos capturados en Misiones para utilizar en diferentes partes de la Argentina, y fuera de la Argentina.

Yo decidí entrar como víctima en Rusia. Allí inicié la investigación. Desde San Petersburgo, y luego en Moscú, en Kazán, en otras ciudades de Rusia y en otros países como Ucrania y Hungría.

Estuve en varios burdeles, en varias ciudades, en varios países. Pero yo no tenía ningún respaldo ni de la policía, ni del periodismo. Nadie sabía que hice eso, porque si se divulgaba o aparecía alguna duda de quién soy, me mataban, sí o sí. Entonces, para que pudiera entrar me cambié el look, tenía otro peinado, y entraba a esos lugares con otro nombre, con otra información.

Y empecé a ser víctima, estaba con las chicas, me prostituyeron, me quisieron matar varias veces, me amenazaron, me golpearon, me cortaron, me dispararon. Tengo el cuerpo marcado porque en algunos países son más brutales en forma de violencia física, otros más en forma de violencia psicológica.

Cuando captan chicas en Argentina es para viajar a Buenos Aires, o en algunos casos para viajar a países europeos. Pero cuando estuve en Brasil las chicas me contaron que no, todos los ofrecimientos eran para viajar a Estados Unidos.

La investigación duró ocho años. Una investigación encubierta, por 20 países. Me transportaron desde un país a otro, en un baúl del auto, dentro de un camión, o dentro de un contenedor de carga. Ellos me daban documentos truchos para que yo cruce la frontera, y así hasta viajé en avión.

La mayoría de las redes venden a sus chicas a personas de clase media y clase baja, porque las chicas VIP no son víctimas de trata. Es elección de ellas. Por algunas razones creo que están equivocadas, pero hablan dos o tres idiomas, tienen educación… La clase alta, los VIP prefieren a chicas y chicos para hablar antes del sexo, algo así. Pero las clases medias no: prefieren el sexo común, el sexo perverso, la mayoría de los clientes son de clase media.

En Alemania yo tenía muchísimos clientes que son profesores de la universidad y después de los burdeles se iban a dar las clases para sus estudiantes. Entonces esa hipocresía es terrible. Hablando de las miserias que uno puede encontrar en el lugar del infierno mismo, hablamos también del que contrata el servicio, porque es donde se cierra el círculo. Normalmente hablan sobre ´los clientes´, pero el problema no es la existencia de clientes, el problema son los proxenetas. Porque, por ejemplo, en Francia, con el lema de que sin clientes no hay trata, prohibieron a ’los clientes’, con una ley que se llama criminalización del cliente.

Entonces, cuando la policía encuentra a una prostituta con un cliente, el cliente va preso, la chica está libre. Y fue peor, porque los proxenetas dicen que ahora los ‘clientes’ tienen miedo de tener sexo con las chicas, y piensan: ¿cómo vamos a explotar de otra manera a las chicas que tenemos? Y ellos empiezan a obligarlas a hacer películas pornográficas perversas. Sexo con animales, sexo sádico, donde castigan sus pechos hasta sangrar y otro tipo de perversiones.

¿Quién tiene el beneficio entre proxeneta, víctima y cliente? ¡El proxeneta!

¿Quién obliga a la chica a venderse a través del sexo? El proxeneta. Si no va a encontrar un cliente para ella como prostituta, van a venderla de cualquier otra manera, o van a usarla en un taller clandestino para hacer ropa.

Obvio que no estoy diciendo que los clientes son buenos. Hay clientes buenos y hay clientes malos, perversos, criminales. Insisto: el motor de este negocio es el proxeneta. El que tiene plata, el que es corrupto, el que es juez, de la policía, de cualquier lado que tiene nivel de corrupción, que tiene poder. Y de la prensa hay muchísimos, de las profesiones que tienen poder.

¿Cuáles son las posibilidades de que una mujer que cayó en la red de trata de personas o de explotación sexual, pueda salir o escaparse de allí? ¿Y cuánta responsabilidad tiene el Estado, o de cuánto depende del Estado que una chica en esa condición pueda ganar su libertad? Pocas. Es difícil, porque las chicas están chantajeadas, tienen síndrome de Estocolmo. Es un problema psicológico, porque tienen dependencia psicológica de los proxenetas. Y entonces es difícil escaparse, pero existe esa posibilidad. Si la chica va a tener fuerza, no tanto fuerza física sino fuerza moral, y sale y llama a la Línea 145, que es una línea anónima, gratuita, nacional, donde ella puede pedir ayuda, y dice “yo soy víctima”, el gobierno tiene programas, en especial desde el año 2008, después reformado en el año 2012, de apoyo a las víctimas de trata.

Entonces le dan asistencia médica, jurídica, ahora hay grupos laborales para víctimas de trata. El Estado desde el año 2008 se ha venido ocupando de este tema. Las leyes en ese sentido, en Argentina, están muy desarrolladas. El país tiene una de las mejores leyes a favor de las víctimas de trata, y contra proxenetas, obvio.

A veces preguntan si las personas prostituidas pueden volver a sentir el sexo como una actividad recreativa o placentera o si ya se arruinó eso en su vida. Casi sí. Porque las chicas rescatadas o que tenían esa experiencia toman al sexo como parte de la violencia, y cualquier tipo de sexo, hasta el contacto físico, se toma como parte de la violencia. Por eso cuando hacemos los rescates no tocamos a las chicas. No abrazamos. Nunca. El mero abrazo lo viven como violencia. Después de varios años con psicoterapeuta, con terapia especial, se aflojan un poquito, pero volver a sentir placer a través de la vida sexual es casi imposible. Es difícil, por no decir imposible, de recuperar.

Para Argentina, como para cualquier país, es peligroso que un jefe de Estado esté a favor o defienda la venta de órganos. Porque si eso está en su horizonte, no van a hacer ninguna ley, nada, para prevenirlo. Ese pensamiento de libre mercado de comprar y vender todo tiene base en la lógica ´tu cuerpo es tuyo, lo puedes vender como producto, como quieras, y si es tu cuerpo puedes vender una parte de él, porque es tu propiedad´.

Pero la realidad es muy diferente: muestra que si por ejemplo una persona quiere vender un riñón, y por la ley va a ser legalizado, ¿qué van a hacer los criminales? Van a hacer documentos truchos, que la persona quiere vender el riñón, van a sacar los riñones, y matar a la persona. Pero eso sí, en los papeles va a aparecer todo prolijo, que la persona quería vender ese riñón.



Sandra Barrios es otra voz autorizada. Nacida en Misiones, es la presidenta de la Red Nacional Alto al Tráfico, Trata y Explotación Sexual Comercial – RATT. Ella afirma:

Venimos haciendo este trabajo de visibilización y concientización sobre la trata y el tráfico de personas desde el año 2006. Y estamos en las investigaciones y los rescates de víctimas de trata. ¿Cuánto de esto no nos enteramos, no nos llega la información, no se conoce? Pero muchas veces arriesgando la integridad física, los miembros de la RATT hacen trabajos que son sostenidos en el tiempo y colaborando con las autoridades, para poder romper con esta lógica: un mercado tenebroso, un mercado oscuro, pero un mercado más vivo que nunca. O sea, hablamos de un mercado que pretende poner en cautiverio, en el ostracismo, la vida de personas que son sumergidos en este infierno que es la trata de personas.

No es una casualidad que la Red haya nacido en 2006 en la provincia de Misiones. La frontera ayuda. Para cruzar a Encarnación, en Paraguay, hacen falta 10 o 15 minutos. Y una vez que cruzaron la frontera, se complica la situación porque ya tenemos que ver con las leyes de los otros países. Por eso hay que actuar rápido, de la manera más inmediata posible, porque, como decimos siempre, cuando hay una víctima está en riesgo su vida, y la primera preocupación es salvar la vida de la o las víctimas. Entonces, siempre vamos a un contrarreloj. Y sobre todo acá en esta provincia, que es de triple frontera.


Edvard_Munch-Madonna-Munch_Museum

Nosotros estamos dentro del Consejo Federal de Lucha contra la Trata y Tráfico de Personas, inclusive tenemos regionales. El país está dividido en la región del NEA, del NOA. Increíblemente vino la ministra de Seguridad de la Nación Patricia Bullrich a Misiones y no se reunió con nadie, con ningún referente a ese tema, que para nosotros es fundamental, porque no nos olvidemos que no solamente existe la ‘trata sexual’. Porque uno dice trata de personas y lo primero que imaginan es la trata sexual. Y también tenemos la trata laboral, y todo lo que pasa aquí en el interior referente a la trata laboral, y tenemos el tráfico, que es la venta de niños, de órganos, de fluidos, de tejidos, la venta de fetos para las empresas de cosmética por el colágeno. Nosotros siempre decimos trata y tráfico, y la gente cree que es lo mismo, y una cosa es la trata y otra cosa es el tráfico.

Desde la RATT hemos sido profundamente críticos y repudiamos la liviandad con la que en campaña electoral el ahora presidente Javier Milei naturalizó la venta y comercialización de órganos de seres humanos, sembrando caos y miedo en nuestra sociedad, a través de medios masivos de comunicación. No es un dato menor porque lo dijo cuando era candidato, y ese tipo de declaraciones son las que luego podrían facilitar el secuestro de personas y niños y una serie de delitos conexos y derivados. Y no solo fue Milei, porque esos dichos, oportunamente, los respaldó la canciller Diana Mondino, en el marco de la campaña electoral. ¿La idea de un mercado de órganos como si fuera meramente una operación mercantil traficar y transar con los órganos de los seres humanos, calificando esa posibilidad como algo fantástico para los argentinos?



Lo dijimos por escrito, y lo reitero de manera textual: “Esta afirmación es no sólo inhumana, sino que también es inmoral, haciéndose necesario e imprescindible que la sociedad comprenda que esas políticas de estado, de ese tipo de personas, atentan no sólo contra nuestra sociedad, sino también contra nuestra democracia”.

Dentro de las capacitaciones, inclusive en las que da el Comité Federal, está claro dentro del delito de trata de personas están involucrados algunos funcionarios, personal de las fuerzas de seguridad y algunos empresarios. Siempre, esto es así. Por eso es que, a veces, uno dice ¿pero cómo puede ser si tenemos todo, no aparece o no se toman las medidas? Y bueno, porque está esa complicidad, justamente. Tenemos víctimas que han desaparecido, por ejemplo, hace seis años, y el expediente está en nombre de otra persona. No sé sabe a quién está buscando, ¡a nadie! Hay alguna complicidad ahí dentro. Hay una manipulación de un documento público.

Por otro lado, está estudiado que si no se asiste como corresponde a las víctimas de trata adultas que fueron rescatadas, ellas vuelven; se comunican con las redes o con sus captores y vuelven. Esto es increíble. Ese es el síndrome de Estocolmo, porque no pasa un mes o dos meses para que tengan esas secuelas.

A la semana o a los 10 días ya están totalmente convencidas de que quieren volver. Sucede que cuando las captan, tienen un tiempo que se llama ‘de ablande’. Una vez que le captaron, ya le sacaron la documentación y los llevan a ciertos lugares…son habitaciones de dos por dos, las drogan constantemente y entran constantemente de a cinco, de a diez personas a violarlas todo el tiempo. Ese es el periodo de ablande.

Pasada una semana o 15 días que tuvieron este calvario, entonces se la saca y se le dice que todo puede ser más leve si ellas aceptan hacer tal o cual cosa. ¡Hay que imaginar a esa mujer o ese hombre, porque también hay clientes para los hombres, que están totalmente en estado de drogadicción y mentalmente están entregadas!

Entonces, con la promesa de que las van a dejar ir, les dicen que ya no van a ser ‘así’, que no va a ser tanta cantidad que les van a entrar a violar, sino que va a ser, pongamos, diez o cinco por día. Y entonces cuando rescatamos a esa víctima ¿en qué situación está? ¿Y por qué después, si no se las asiste como corresponde, por qué quieren volver? Porque todo eso va generando ese síndrome de Estocolmo y el cuerpo les pide. El cuerpo les pide no solamente la droga, que eso sabemos que ya pasa a ser una adicción, sino que esos golpes, esas violaciones, el mismo cuerpo les pide. Es una locura la manera cómo les trabajan psicológicamente.

Y cuando se rescatan menores, si se trabaja como corresponde, pueden sanar, recuperar, pueden insertarse el día de mañana. Esto hasta hoy no lo he visto en ninguna provincia.


El material que publica la revista web www.purochamuyo.com / Cuadernos de Crisis pertenece al Colectivo Editorial Crisis Asociación Civil. Los contenidos solo pueden reproducirse, sin edición ni modificación, y citando la fecha de publicación y la fuente.

REGISTRO ISSN 2953-3945


4 comentarios

  1. La prostitución es esclavitud .
    Sadismo y violencia máxima. En países como Suiza está permitida por ley que una niña de 14 años pueda «dedicarse» a la prostitución
    Una nación de paz ?
    Terrible. Se permite en Holanda que se muestren en vidriera como mercancía hasta mujeres embarazadas!
    La humanidad está perdida.

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